Le llaman el sótano. Queda en un primer piso y no tiene “casquivaches”. Tiene libros y periódicos de pasados, tal vez lejanos, tal vez cercanos. Un entresuelo de colecciones de papel. Un acervo híbrido de papeles amarillados. Materiales retrospectivos. Una sala repleta de libros y periódicos de antaño que pareciera querer esconderse, en un recoveco de la Biblioteca José M. […]
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